El reto de abril, «máquina», me ha servido de excusa para encuadernar uno de los proyectos mas entrañables que hemos hecho en familia. Hace mucho tiempo, en el año 2009, decidimos diseñar un pelador de manzanas, y lo hicimos entre los cinco. Cada uno pensó uno o varios posibles diseños, y en una memorable reunión se presentaron, defendieron y se sometieron a votación. El proyecto elegido fue desarrollado… hasta cierto punto. Porque antes de terminarlo, abandonamos. Y lo que es peor, compramos en una tienda un pelamanzanas, que tampoco usamos tanto. Sí, puede decirse que fue un fracaso… ¡pero disfrutamos tanto de aquellos momentos!
Los diseños, tan variados por los intereses y la edad de los participantes, quedaron guardados en una carpeta sin orden ni concierto. Y ahora es el momento de crear para ellos un envoltorio digno. Allá va:
La primera parte del proyecto son los diseños de los cinco. Unos mas elaborados que otros; algunos incluyen explicación y materiales (no he subido todas las fotos, solo algunas). Todos geniales. ¿Cuál sería el proyecto elegido?
Los proyectos se sometieron a votación… ¿cuál sería el elegido? Esta parte del proceso se recoge en «Cosas manzaneantes». Hay mas páginas, esta es una muestra.
Una vez elegido el diseño ganador, se procedió a su construcción:
Y esto es todo. Nunca se terminó, pero el proceso fue divertido. Un éxito familiar.